ARCHIVOS DEL VATICANO
Parte I
Hace 10,000 años hubo una civilización avanzada que vivió por todo el mundo. Dicha civilización era gobernada por los maestros más poderosos y admirables que el mundo jamás conoció. Este grupo de maestros, 13 en total, estaba dotado de una mente que comprendía la física, la geometría, el espacio,
el tiempo y la distancia. Entendían lo que es Dios.
Estos extraordinarios 13 maestros que vivieron hace 10,000 años, fueron repartidos en todos los continentes que ahora viven o que están bajo agua. Su misión era instruir a la raza genética mitad y mitad en áreas de educación y entendimiento. Era su misión levantar a la especie por encima de la supervivencia hasta un entendimiento de la inmortalidad.
Se llamaban los Hijos del Sol.
Hace diez mil años estos maestros pusieron en movimiento lo que es ahora el residuo de la civilización. De lo que estos maestros transmitieron hace diez mil años, ustedes no conservan ni un vestigio. Su permanencia aquí fue de 2,000 años. Estos maestros nunca perecieron. Más tarde, en los mitos y leyendas, se les llamó arcángeles. De hecho, ellos fueron los maestros más grandes de origen celestial que existieron sobre esta tierra. Vinieron a enseñar, a poner el conocimiento en acción, antes de que un cataclismo sobreviniera sobre este plano cambiándolo geográficamente a tal punto que hoy apenas se recuerda cómo fue.
Sus alumnos fueron los descendientes de los Jónicos, que más tarde llegaron a ser los Griegos, quienes luego inspiraron a los Romanos, los que a su vez iluminaron al mundo. Sus alumnos también inspiraron a los que llegaron a ser los Turcos y toda Mongolia. Sus alumnos fueron los Chinos originales, las gentes de Catay, las dinastías más antiguas del mundo y quizá las más civilizadas.
Los gigantes de piedra en una isla llamada de Pascua.
Estos maestros de hace 10,000 años fueron los que enseñaron a los estudiantes que
tallaron sus imágenes en piedra, a todos los 593 que pusieron sus ojos en el cielo
y se despidieron de este plano.
Todos los 593 que tallaron su imagen en piedra están vivos hoy.
¿Por qué necesitarían unos maestros tan extraordinarios? ¿Por qué no están aquí
ahora? Sí están.
¿Qué es lo que hay dentro de ustedes que se empecina en la destrucción? ¿Qué parte de su árbol genético insiste en la aniquilación del yo, del planeta, y de su capacidad para la vida? Estos maestros instruyeron a los pocos que
convirtieron esa destructividad en conocimiento y verdad. Luego, se marcharon,
hace mucho tiempo. Poco después de su partida, esta tierra entró en convulsiones
que duraron hasta hace 3,500 años, cuando sus Montañas Rocosas estaban todavía en proceso de formación.
¿Qué es lo que les impide ser todo lo que pueden ser? ¿Qué hay en su pensamiento que insiste en la autodestrucción y la devastación de este organismo en el que viven? Porque a eso es a lo que se enfrentan de nuevo.
Esta gente ha vigilado esta mancha de polvo en la parte exterior de la Vía Láctea con su sol amarillo, porque tienen una inversión aquí. La gente que quedó aquí son los descendientes de esas antiguas civilizaciones, las semillas de los maestros de hace 10,000 años. Su trabajo era y, aún lo es, traer la verdad a cada
civilización y tratar de mantenerlos vivos a pesar de que ustedes insisten en morir.
Ellos están tratando de mantenerlos vivos de modo que algún día puedan tallar su propia piedra y dejar este lugar para convertirse en un ser interdimensional. Pero tienen que vivir suficiente tiempo para poder ir a la escuela a
aprender cómo se hace eso. Aquí no estamos hablando de la escuela de esta civilización. ¡Nos referimos más bien a una escuela que desafía cualquier explicación de la verdad que hayan escuchado!
Estos seres están guardando muchas cosas para ustedes. (También se llaman los Constantes). Estos maestros les dejaron notables símbolos al enseñar a su gente a ejecutar cosas grandiosas, como por ejemplo, tallar una piedra viviente a su propia imagen usando sólo el pensamiento. Les enseñaron a desafiar la gravedad al mover dicha piedra. Los que tallaron su imagen también tallaron en
piedra la tablilla de sus vidas, para la posteridad, de modo que toda civilización
recordara lo que ellos eran capaces de hacer.
La isla y esos monumentos sobrevivieron a todo lo que sucedió a esta tierra. Todavía están aquí hoy; es la isla de los gigantes, en el Pacífico Sur.
Escuela de Sabiduría Antigua
Ramtha
Continuará ..
