Lunes 5 de octubre
¡Cómo amo tu ley, sí! Todo el día ella es mi interés intenso (Sal. 119:97).
Para proteger el corazón, no solo debemos cerrarles el paso a las malas influencias, sino también abrírselo a las positivas. En las ciudades amuralladas, el portero cerraba las puertas para impedir que entrara el enemigo. Pero en otros casos las abría para permitir la entrada de alimentos y otras provisiones. De no hacerlo, los habitantes morirían de hambre. De modo parecido, tenemos que abrir con regularidad nuestro corazón para que entren las enseñanzas de Jehová. En la Biblia, encontramos los pensamientos de Dios. Por eso, siempre que la leemos, permitimos que estos influyan en nuestra manera de pensar, sentir y actuar. A fin de aprovechar al máximo nuestra lectura de la Biblia, debemos hacer dos cosas. En primer lugar, es imprescindible orar para que Jehová que nos ayude a ver "las cosas maravillosas" que contiene su Palabra (Sal. 119:18). En segundo lugar, debemos meditar en lo que leemos. Cuando hacemos todo esto, la Palabra de Dios alcanza lo más profundo de nuestro corazón y llegamos a amar la forma de pensar de Jehová (Prov. 4:20-22). w19.01 18 párrs. 14, 15
Martes 6 de octubre
Ofrezcamos siempre a Dios sacrificio de alabanza (Heb. 13:15).
Jehová sabe que cada uno de nosotros tiene diferentes capacidades y circunstancias, y aprecia mucho los sacrificios que podemos ofrecerle. Pensemos en los tipos de sacrificios que aceptaba de los israelitas. Los que tenían medios para ello le ofrecían una cordera o una cabrita. Los que eran pobres podían ofrecer "dos tórtolas o dos pichones". Y, si alguien no tenía ni siquiera para presentar dos aves, Jehová aceptaba "un décimo de efá de flor de harina" (Lev. 5:7, 11). Aunque la harina era más barata, Dios valoraba ese sacrificio, siempre y cuando fuera "flor de harina", es decir, harina fina, de buena calidad. Nuestro Dios sigue pensando igual hoy día. Cuando ofrecemos comentarios, es considerado y no espera que todos nos expresemos tan bien como Apolos o seamos tan convincentes como Pablo (Hech. 18:24; 26:28). Todo lo que nos pide es que lo hagamos lo mejor que podamos. Recordemos a la viuda que donó dos moneditas. Jehová la aprobó porque ofreció todo lo que tenía (Luc. 21:1-4). w19.01 8, 9 párrs. 3-5
Miércoles 7 de octubre
Ustedes serán objeto de odio de parte de toda la gente por motivo de mi nombre (Mat. 10:22).
Debemos esperar que este mundo nos odie. Jesús predijo que sus discípulos serían perseguidos con dureza en los últimos días (Mat. 24:9; Juan 15:20). La profecía de Isaías nos advierte que nuestros enemigos no solo nos odiarán, sino que usarán diversas armas para atacarnos. Entre ellas están los engaños sutiles, las mentiras descaradas y la persecución cruel (Mat. 5:11). Jehová no impedirá que nuestros enemigos utilicen estas armas (Efes. 6:12; Rev. 12:17). Pero no debemos tener miedo. Él dice que "no tendrá éxito" ningún arma que se utilice contra nosotros (Is. 54:17). Tal como un muro nos protege de los fuertes vientos de una tormenta, así Jehová nos protege del "soplo de los tiránicos" (Is. 25:4, 5). Nuestros enemigos nunca lograrán causarnos ningún daño permanente (Is. 65:17). Todos los enemigos del pueblo de Dios "llegarán a ser como nada, y perecerán" (Is. 41:11, 12). w19.01 6, 7 párrs. 13-16
Jueves 8 de octubre
Donde está el espíritu de Jehová, hay libertad (2 Cor. 3:17).
Jóvenes, Jehová ama la libertad, y nos hizo de tal manera que también la amemos. Pero, al mismo tiempo, quiere que la usen bien, pues eso los protege. Es posible que conozcan a otros jóvenes que ven pornografía, mantienen relaciones sexuales inmorales, practican deportes peligrosos, consumen drogas o abusan del alcohol. A lo mejor disfrutan de unos momentos de emoción o placer. Pero por lo general pagan un precio muy alto: se hacen adictos, se enferman o incluso mueren (Gál. 6:7, 8). Creen que son libres, pero se engañan a sí mismos (Tito 3:3). Por otro lado, obedecer a Jehová nos beneficia. Es bueno para nuestra salud y nos hace libres de verdad (Sal. 19:7-11). Es más, cuando usan bien su libertad —es decir, dentro de los límites de las leyes y los principios perfectos de Dios—, les demuestran a Jehová y a sus padres que se les puede dar más libertad (Rom. 8:21). w18.12 22, 23 párrs. 16, 17
Viernes 9 de octubre
El hombre dejará a su padre y a su madre, y tiene que adherirse a su esposa, y tienen que llegar a ser una sola carne (Gén. 2:24).
El pecado de Adán trajo muchos cambios. Uno de ellos fue la muerte, que afectaría al matrimonio. Lo señaló el apóstol Pablo cuando explicó que los cristianos no deben seguir la Ley mosaica. Reveló que la muerte pone fin al matrimonio y que el cónyuge vivo puede volver a casarse (Rom. 7:1-3). En la Ley que Jehová le dio a la nación de Israel, hallamos algunos detalles sobre el matrimonio. Veamos uno de ellos. La Ley permitía que el hombre tuviera más de una esposa, una práctica que se conoce como poligamia y que ya existía antes de que Dios le diera la Ley a Israel. Lo que Jehová hizo fue regular esta práctica para que no hubiera abusos. Por ejemplo, si un israelita se casaba con una esclava y luego tomaba otra esposa, tenía que seguir dándole a la primera comida, ropa y el débito conyugal. Dios mandaba que la protegiera y la cuidara (Éx. 21:9, 10). Nosotros no estamos bajo la Ley, pero en ella vemos el interés de Dios en el matrimonio. Sin duda, esto nos ayuda a valorarlo igual que él. w18.12 10 párr. 3; 11 párrs. 5, 6
Sábado 10 de octubre
Ustedes no creerán aunque se les cuente (Hab. 1:5).
Habacuc había dejado sus inquietudes en manos de Jehová. Pero entonces quizás se preguntó cuál sería su reacción. Puesto que Jehová es como un padre que comprende a sus hijos y se pone en su lugar, no reprendió al profeta por sus quejas sinceras. Dios sabía que eran un grito desesperado de dolor. En palabras que en realidad iban dirigidas a los israelitas infieles, Jehová le dijo lo que ocurriría en el futuro cercano. Es muy probable que Habacuc fuera la primera persona a quien Jehová le reveló que aquella época violenta se acercaba a su fin. Jehová le hizo ver a Habacuc que estaba preparado para actuar. Aquella generación malvada y violenta no tardaría en recibir un castigo. Con la expresión "en los días de ustedes", Jehová indicó que su juicio llegaría en los días del profeta y sus contemporáneos. Ahora bien, ¿era esta la respuesta que esperaba Habacuc? En absoluto. Lo que Jehová dijo significaría más sufrimiento para todo Judá. w18.11 15 párrs. 7, 8
Domingo 11 de octubre
La voluntad de Dios es que hombres de toda clase se salven y lleguen a un conocimiento exacto de la verdad (1 Tim. 2:4).
¿Cómo vemos a las personas que aún no conocen la verdad? Es cierto que el apóstol Pablo fue a las sinagogas para buscar a los que ya sabían algo sobre Dios. Pero no solo les predicó a los judíos. Por ejemplo, durante el primer viaje misionero de Pablo, los habitantes de la región de Licaonia creyeron que él y Bernabé eran los dioses Zeus y Hermes en carne y hueso. ¿Se dejaron llevar Pablo y Bernabé por los encantos de la fama y la popularidad? ¿Se lo tomaron como un descanso después de haber sufrido persecución en las últimas dos ciudades que habían visitado? ¿Pensaron que esa publicidad podría favorecer la predicación? En absoluto. De inmediato rasgaron sus vestiduras y empezaron a gritar entre la multitud: "¿Por qué hacen estas cosas? Nosotros también somos humanos que tenemos sufrimientos igual que ustedes" (Hech. 14:8-15). w18.09 5 párrs. 8, 9
YHWH dara lo nesesario,de alli viene el dicho que hasta hoy se escucha:En su montaña YHWH,da lo nesesario. bereshit.22:14
gomezburgara@yahoo.com.mx
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.