28 Cuando la gente del pueblo se levantó temprano a la mañana siguiente, encontraron que el altar de Baal y el símbolo de Asera había sido cortado, y que el segundo toro había sido quemado en el altar que se había construido allí. 29 Se preguntaban unos a otros: “¿Quién hizo esto?” Ellos investigaron y descubrieron que Gedeón hijo de Joás lo había hecho. 30 Y ellos dijeron a Joás: “Trae a tu hijo aquí, así que podemos matarlo! Se arrancó el altar de Baal y cortó el símbolo de Asera junto a él “.
31 Pero Joás respondió a todos los que se enfrentó a él, “están discutiendo por Baal? Lo defiendes? Cualquier persona que argumenta a favor de él se mató antes de la mañana. Si Baal es un dios, que defenderse. Es su altar que fue derribada “32 A partir de entonces Gedeón era conocido como Jerobaal, ya Joás dijo:“Que Baal se defienda.; es su altar que fue derribada “.
33 Pero todos los madianitas, los amalecitas, y las tribus del desierto se reunieron, cruzaron el río Jordán, y acamparon en el valle de Jezreel. 34 El espíritu del Señor se apoderó de Gedeón, y éste tocó el cuerno para llamar a los hombres del clan de Abiezer a seguirlo. 35 Y envió mensajeros por todo el territorio de ambas partes de Manasés llamarlos a seguirlo. Envió mensajeros a las tribus de Aser, Zabulón y Neftalí, que también vino a unirse a él.
36 Entonces Gedeón dijo a Dios: “Usted dice que usted ha decidido utilizarme para rescatar a Israel. 37 Bueno, yo estoy poniendo un poco de lana en el suelo en el que trillarás trigo. Si por la mañana hay rocío solamente sobre la lana, pero no en el suelo, yo sé que me van a utilizar para rescatar aIsrael.”38 Eso es exactamente lo que sucedió. Cuando Gedeón se levantó temprano la mañana siguiente, se apretó la lana y se retorció el rocío fuera de él para llenar un recipiente con agua. 39 Entonces Gedeón dijo a Dios: “No te enojes conmigo; déjame hablar sólo una vez más. Por favor, permítanme hacer una prueba más de la lana. Esta vez dejó que la lana quede seco, y el suelo sea mojado.”40 Esa noche Dios hizo esa misma cosa. A la mañana siguiente la lana estaba seca, pero el suelo estaba mojado por el rocío.
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