Efesios 2: 1-10 Y El
os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y
pecados, en los cuales anduvisteis en otro tiempo, siguiendo la
corriente de este mundo, conforme al principe de la potestad del aire, el espiritu que ahoraopera en los hijos de desobediencia, entre los cuales tambien
todos nosotros vivimos en otro tiempo en los deseos de nuestra carne,
haciendo la voluntad de la carne y de los pensamientos, y eramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los demas. Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amo, aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos), y juntamente con el nos resucito, y asimismo nos hizo sentar en los lugares celestiales con Cristo Jesus, para mostrar en los siglos venideros las abundantes riquezas de su gracia en su bondad para con nosotros en Cristo Jesus.
Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de
vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe.
Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesus para buenas obras, las cuales Dios preparode antemano para que anduviesemos en ellas.
Cualquiera que piense de si mismo como una persona muy buena, debe analizar como evalua Dios a la humanidad. El dice que todos venimos al El muertos espiritualmente y gobernados por Satanas y nuestra naturaleza pecaminosa. A los ojos del Señor, somos hijos de ira que solamente merecemos castigo.
Cualquiera que piense de si mismo como una persona muy buena, debe analizar como evalua Dios a la humanidad. El dice que todos venimos al El muertos espiritualmente y gobernados por Satanas y nuestra naturaleza pecaminosa. A los ojos del Señor, somos hijos de ira que solamente merecemos castigo.
Por
otra parte, Dios es tan puro y santo que esta totalmente separado de
todo pecado, y no puede mirarlo con favor o aprobacion (Hab 1.13).
Todo lo que Dios hace es correcto y favorable; en comparacion, incluso
las acciones justas de los hombres, son como trapos de inmundicia (Is
64.6). Sin embargo, a pesar de que no tenemos nada de valor que
ofrecerle, el Señor nos quiere como su propiedad, y ha hecho todo lo
necesario para que nos acerquemos a El.
Quienespusimos
nuestra fe en Jesucristo, hemos sido vivificados espiritualmente en El,
y todos nuestros pecados han sido perdonados. Hay un dramatico
contraste entre lo que eramos antes, y lo que somos ahora en el Señor.
Pero este cambio no tiene nada que ver con lo bueno que hemos sido.
Incluso, la fe con la que respondemos al Salvador, nos la da Dios. Nunca
podremos hacernos justos a nosotros mismos; todo es un regalo de Dios. Y
una vez que El nos declara justificados, nunca mas seremos declarados
culpables.
Dios
ha dicho que en los siglos venideros, El quiere mostrar las =abundantes
riquezas de su gracia en su bondad para con nosotros= (Ef 2.7). Por
toda la eternidad se derramara sobre nosotros esta impresionante
demostracion de su amor que no se compara con nada de lo que conocemos
en este mundo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.